Victoire A. Weasley

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¿Cómo describir a una persona tan dulce y agradable como es Victoire? Pero, sí ya lo he dicho, hombre. Dos palabras, que en verdad, fácilmente podrían describir solo la primera capa de esta chica, pero recordad que dije sola una, ¿eh?
Tan dulce como el azúcar, tan agradable como la miel y refinada como un exquisito licor. No me cabría duda decir que a lo mejor acertamos en esa última frase, y tampoco tuviera miedo de asegurar que toda persona la ve así. Calidez, otro sustantivo que bien la podría definir y que nadie tendría argumento para refutar. Un rayo de sol enfrascado en un cuerpo de mujer que ya y solo le faltarían alas para ingresar al cielo.

- ¿Por qué siempre anda tan feliz?-
-¿Y por qué usted siempre con una cara tan larga?-

Decisión. La respuesta es tan simple que la encuentras en cualquier página de un diccionario. Decisión a estar alegre, a dejar los problemas atrás, a dejar los problemas de la casa en la casa y los del trabajo en el trabajo como bien ese famosísimo dicho propone, que no hace falta ser muy sabio o haber leído mucho como para alguna vez haberlo escuchado. Todo tiene una respuesta, y si no la tiene, se la busca; y lo más importante, todo tiene una solución. No ve el vaso medio vacío o medio completo; lo ve entero; aunque sea más de aire que propia agua, pero de alguna u otra forma ya está lleno ¿Por qué tratar de ahogarse en una diminuta copa cuando hay piscinas a montones? Aunque sea consíguete un balde gigante.

-Parece como si nadie ni nada la molestase, señorita.-

Problema, según y como lo define el diccionario: cuestión que se trata de aclarar; proposición o dificultad de solución dudosa; preocupación, disgusto ¿Cómo su cabeza lo asimila? Problema igual a malo. Simplemente malo, así de sencillo y básico, sin mucha ciencia o filosofía en el asunto. Algo así de malo te da un dolor de cabeza. Al igual que todo posee una alternativa correcta, también posee consecuencias, y si posee consecuencias, pues es más que obvio que habrá precauciones.

Sensata, una persona que piensa antes de actuar y no al contrario como lo hacen muchos. Una mujer de ya unos 22 años, madura y prudente que ha pasado por mucho para ganar ese buen juicio del cual ahora se hace acreedora. Como un tipo de computadora que no permitiese margen de error, pero dije como, y no puse que es un robot. Y es ahí donde el límite de la cautela choca con su naturaleza humana. Sí, es humana, alguien que no solo usa su cerebro, pero también su corazón-hablando en la manera más metafórica posible-.

Un ser lleno de sensaciones, emociones, pensamientos y sentimientos. Y quién más que ella, una persona apasionada, que lo da todo por todo o nada por nada.

Hasta los más acaramelados postres necesitan a veces de una pizca de sal o un poco de algún ingrediente amargo para no empalagar el sentido del gusto. La vida es igual, las personalidades también, y es en los matices diferentes en donde se puede gozar de esta completamente, incluso en las cosas más simples, se puede apreciar la complejidad ¿Y qué mujer no es compleja?

Contestando a esa pregunta, que a ella le gusta dar una respuesta siempre, solo digamos que ella tampoco es la excepción al caso. Las personas tienen un término, su paciencia, mucho más; su bondad, igual; y su buena voluntad, pues eso ya queda obvio. La amabilidad no es sinónimo de torpeza, y ella no tiene nada de tonta. Diablo sabe más por viejo que por diablo, dicen. Y ella tiene cierto tiempo experimentado esa pesada tarea de convivir con gente. Roces, riñas, palabras que no debieron pronunciarse, actos que no debieron hacerse, y todo continúa en un círculo. Desde el comienzo, te saludará con una sincera sonrisa, pero tendrá protegida la espalda y el pecho con un chaleco antibalas, y para ser más comunes, “anti-puñales”. Garritas afiladas y pelos de puntas son muy fáciles de aparecer de la nada, pero no tanto de detectarlos a simple vista. Su inocencia no debe ser confundida con desvergüenza. Puede aparentar ser amiga de todos, pero llegar a ser los mejores, ahí hay un largo trecho. Se preocupará demasiado por quien sea y quien no sea, todavía, su amistad, pero ella sabrá a quién dar más y quién se lo merece realmente. Maternal, confidente, un hombro que podrá ser utilizado incontable veces como almohada y pañuelo, pero también espera que ese amor que ella da al cien por ciento, al menos le respondan en un mínimo cincuenta, aunque claro, muchas veces no ocurren así por más que uno se desee. Y ahí viene a recalcar ese sentido de madre sobreprotectora, el dolor ajeno lo sentirá como si fuera propio, pero el dolor de ella, nadie más lo sentirá que solo ella misma. Grandes oídos para escuchar los pesares de otros, y por supuesto que labios sellados para nunca repetirlos a alguien más, pero de esta misma manera se mantendrán cuando es el momento de contar los suyos. Se podría decir que es insegura en ese aspecto o tal vez peca de demasiado reservada, pero de que otra manera los demás le vieran como ese rayito de sol y perfección que erróneamente piensan que es. Al final, las personas se preocupan más de sus cosas personales y solo quieren alguien que los escuche, esa tarea lo cumple ella, y es que alguien tiene que hacerlo.

Y no solo de dulce, sal o café se componen los alimentos y si fuera así a nadie le gustaría comer. Son incluso más importantes esos pequeños ingredientes casi inexistentes, casi desapercibidos que hacen un buen plato de comida. Con una pizca de torpeza, una cucharada de valentía, un poco de timidez, algo de silencio, pero mucho y mucho amor que dar.

Gustos&Disgustos:

Familia:

»Bill (William Arthur) Weasley :• Padre
Su primogénita y su pequeña princesa, sin importar realmente la edad o el hecho de que ya posee ciertos años, pero no es que le disguste en absoulto; es más, le encanta haber sido-y ser- una niña mimada.

»Fleur Isabelle Weasley (Delacour) :•Madre
Aquel cuello largo solo indica realeza y esa es su madre, la que no solo le enseño a ser una señorita de sociedad, pero sino a utilizar una filuda varita cuando lo necesitase.

»Dominique Weasley :• Hermana
Adora a su hermana como a ninguna otra, pero no es de su gusto decir que tienen la mejor relación. Como perro y gato, suele definir como se llevan, aunque debe aceptar que en muchas cosas tienen un gran parecido.

»Louis Weasley :• Hermano
El más pequeño de los Weasley-Delacour, y solo por ser aquello ya lo ama y mima en damasía. Sin embargo, sabe que hay algo en su hermano que no le cuadra en lo absoluto.

»Ted Remus Lupin :• Prometido
No tiene ningún sonrojo en decir que encontró el amor de su vida y que estaría dispuesta a hacerlo todo por él. Lo conoció en sus años escolares y desde ahí se hicieron inseparables. Sabe que Ted nunca le diría que no, así que a veces lo puede usar como un beneficio, pero son solo pequeñas manías que tiene como chica.

Historia:

Nacida el 2 de Mayo hace parecer que el nombre le calzó perfectamente y que sus padres no tuvieron ninguna otra oportunidad en elegir algún otro, pues llamada en honor al aniversario de la Batalla de Hogwarts, Victoire era lo ideal, no solo la victoria entre el bien y el mal, pero la propia victoria de sus padres, William y Fleur Weasley. Y así como había sido la princesa por un par de años en la familia, vendría una bella flor en añadidura, su hermana menor: Dominique, y no se haría esperar que los tres mosqueteros se completarían y el pequeño caballero aparecería en la vida de los anglo-franceses: Louis.

Criada en una familia mágica bajo los preceptos de todo Gryffindor y de toda señorita de alta sociedad perteneciente y orgullosa de la escuela de Beauxbattons, a Victoire no le quedo de otra que no ser aquella fuerte, pero, a la vez, delicada damita para luego convertirse en una joven y, en un futuro, una mujer.

Siendo la mayor del legado Weasley era un hecho que su carta de bienvenida y aceptación a Hogwarts se le enviaría primero, pero de ahí a que, desde un principio, la pequeña rompería con la gran tradición de los antiguos pelirrojos, al menos no se lo esperaban tan pronto. Y es que todo Weasley llevaba en su pecho el escudo escarlata con un león en él, pero ella no, ella sería un feroz y ávido águila por los próximos siete años de su vida escolar, y para que negar, un Ravenclaw siempre es uno fuera y dentro del colegio. Sin embargo, fueron justamente en aquellos años de retoño que el verdadero amor tocó a su puerta y se trataba de nada menos de aquel chico que había sido educado como casi uno más de su familia, pero que ahora lo quería tener como algo más que un simple amigo o conocido por su tío Harry. Sí, Ted Lupin lucía como el indicado y ella no posee ninguna duda en que realmente lo es o al menos eso dice la cantidad de años que llevan los dos juntos.

Cuando tuvo que pensar en una profesión definitivamente se presentó muchas oportunidades en frente de ella. Al ser una destacada alumna en sus años académicos (pertenecía al Club de las Eminencias y fue Prefecta y de su casa como todos los Weasley), la mejor opción parecía dirigirse a convertirse en Auror. Ahora tiene la chance de trabajar como tal junto a Ted, Harry y Ron.

Otros:

»Llegó-y llega- a odiar su cumpleaños algunas veces. Aquella fecha no parece ser más que el recordatorio de muertes especiales en el mundo mágico y, también, en su propio mundo, al cual pertenece Ted y sus padres.
»Desde que conoció a Ted y sus cabellos de miles de matices no tiene ningún color predilecto.
»Desde que fue una niña pequeña, antes que entrase a Hogwarts, sabía que su casa tenía que ser Ravenclaw. Soñaba con ser tan inteligente como su tía Hermione, tan talentosa como su madre, Fleur, y no solo una rubia bonita.
»Es parte Veela por su bisabula materna.
» Es de sangre pura, aunque se le podría considerar mestiza al tener los genes de su madre.